Estaban cobrando cupos a los comerciantes de Gamarra y ellos reclamaron al ministro del Interior que tome cartas en el asunto.
El ministro no tomó ninguna carta, físicamente hablando, simplemente dispuso el traslado de numerosos policías que, junto a miembros del cuerpo de serenos del distrito de La Victoria, sacaron a todos los ambulantes que ocupaban las calles del emporio comercial y con ellos salieron los que cobraban cupos.
Tomar cartas en el asunto significa atender inmediatamente aquello que está demandando el concurso de alguien, en este caso de las autoridades.
Cuando se produce un incendio son los bomberos quienes deben tomar cartas en el asunto y una mujer está por dar a luz son los médicos u obstetras quienes deben hacerlo.
El gobierno decide tomar cartas en el asunto cuando dispone financiar la ejecución de una serie de obras para prevenir desastres por la inminente llegada del fenómeno de El Niño.
Resulta complicado indagar sobre el origen de la expresión tomar cartas en el asunto y una explicación es la forma como antiguamente los gobernantes daban órdenes mediante cartas que contenían las disposiciones para atender el asunto.
En cambio, hay otros que pretenden una explicación diferente como la lectura de los naipes y el deseo adivinador del futuro. Reyes, reinas y príncipes están siempre presentes en las cartas, en los naipes.
En cualquier caso, cuando escuchamos a gente reclamar que las autoridades tomen cartas en el asunto, generalmente se trata de una demanda por aquella situación que refleja olvido o descuido del gobierno.
La inseguridad ciudadana de estos días, por ejemplo, dirige la demanda hacia los policías encargados del orden público y la crisis de una economía en recesión exige mayor atención de los responsables de las finanzas públicas.
La crisis en la fiscalía de la nación obligó al Congreso de la República a tomar cartas en el asunto de la Junta de Justicia, pero el asunto escapo de sus manos gracias a leguleyadas para las que abundan los expertos.
Odebrecht sigue haciendo de las suyas y sería bueno que alguien tome cartas en el asunto.