Hablar sin pelos en la lengua es hablar claramente, de frente, sin figuras retóricas, sin maquillar la verdad, para que se entienda el mensaje que está dando, sin distorsiones ni malos entendidos.
Como todos los dichos, se trata de una figura retórica que ayuda a explicar que el individuo no tiene impedimento alguno para decir sus verdades.
Periodistas de todo el mundo recurren a este dicho para titular sus espacios de opinión, programas periodísticos o columnas de opinión en publicaciones impresas.
La posibilidad de tener pelos en la lengua es remota, es una extraña patología que consiste en el crecimiento desmesurado de las papilas gustativas, hasta parecer pelos.
El problema de salud bucal tiene su origen en la deficiente higiene que propicia el crecimiento de microorganismos y hasta hongos. El tratamiento tiene que ver con medidas de higiene y revisión de la dieta diaria.