Al comenzar los años 70, en plena dictadura de Velasco Alvarado, tenía intención de escapar del Perú y lo más cerca que estuve fue trabajar en el aeropuerto.
Conocía poco de mi país y gracias a este trabajo comencé a viajar por todo el Perú, subí a toda clase de aviones, desde el Lockheed Martin C-130J Súper Hércules hasta pequeñas avionetas, pasando por turbohélices que me dejaban sordo con el ruido de sus motores.
Ver desde el aire la inmensidad de nuestro territorio y conversar con habitantes de las más diversas ciudades de las tres regiones me fue cambiando la idea de salir del Perú.
Gracias a ese trabajo fui por primera vez a la selva y conocí Iquitos el rio Amazonas, Tarapoto, Yurimaguas y Pucallpa, los Baños del Inca en Cajamarca y Machu Picchu en el Cusco, el lago Titicaca en Puno y repasé mis pasos por el Convento de Santa Catalina, el Cañón del Colca y las faldas del Misti, disfruté del calor de Tumbes, el seco de chavelo en Piura y el de cabrito en Chiclayo y volví a visitar la misteriosa ciudadela de Chan Chan en Trujillo.
Largo sería contar todos los lugares y gente que conocí y me acogió con la hospitalidad que derrochan los buenos peruanos y que recuerdo con profundo agradecimiento.
Abandoné la idea de dejar todo eso por viajar a otros países cuando me di cuenta que la felicidad la tenía aquí a la mano y constaté que tenemos mucho por conocer de nosotros mismos, vivimos en un país maravilloso.
Entendí también que no hay mal que dure cien años ni cuerpo que lo resista y participé en las marchas de protesta contra la dictadura que desde San Marcos impulsamos con el atrevimiento propio de la juventud.
El tiempo me dio la razón y en Tacna fui testigo del fin de la primera fase y aunque después hubo cinco años más de gobierno militar, vi también que las cosas fueron cambiando hasta el retorno a la democracia al comenzar los 80.
Ahora que padecemos una pesadilla similar a la de los 70 sugiero no escapar a otros mundos desconocidos, sino luchar desde adentro para cambiar aquello que es posible cambiar y disfrutar de todo lo bello que nos regala esta linda tierra.