Tratando de justificar su voto en favor del candidato comunista escucho argumentos como que aquí nos espantamos con la palabra socialismo y en Canadá viven felices con el socialismo,” yo he estado allá”.
Otros recurren a la misma figura, pero cambian de país y se refieren a Suecia o Noruega. Entonces busqué conocer detalles sobre los sistemas políticos en esos países y es lo que transcribo a continuación.
Canadá constituye una monarquía y un Estado de la Commonwealth con un sistema federal parlamentarista y una fuerte tradición democrática. Sus prácticas parlamentarias derivan del parlamento inglés.
A diferencia de los que ocurre en los países socialistas, hay pluripartidismo. Cuatro son partidos de alcance nacional: Partido Liberal de Canadá (liberal) Nuevo Partido Democrático (socialdemócrata) Partido Verde de Canadá (ecologismo) y Bloc Québecois (socialdemócrata y nacionalismo quebequés). En cada Estado Federado existen varios otros partidos políticos regionales.
Suecia es una monarquía constitucional basada en la democracia parlamentaria. Existen varios partidos políticos como el Socialdemócrata (centroizquierda) Partido Moderado (derecha), Partido Verde (centroizquierda)Partido Popular Liberal (centroderecha)Partido de Centro (centroderecha)Demócratas de Suecia (extrema derecha) Partido de la Izquierda (izquierda).
Noruega es una monarquía constitucional con un sistema parlamentario de gobierno. Las funciones del rey son principalmente ceremoniales, pero posee una influencia como el símbolo de unión nacional. Nunca ha sido un país socialista, mantiene estabilidad monetaria, sin intervención gubernamental. El país tiene un gran compromiso con el libre comercio. Es además un paraíso para comenzar nuevas empresas.
Son varios los partidos políticos en Noruega: Partido de la Izquierda Socialista, Partido del Progreso, Partido Demócrata Cristiano, Partido Nacionalsocialista Obrero Noruego, Partido Pirata de Noruega, Partido Sociedad y Partido Verde.
A la libertad política hay que sumar libertad económica, respeto a la inversión privada, libertad de prensa y libertad religiosa. Son las libertades las que no se respetan en los países socialistas.
El licenciado Castillo proclama el marxismo, leninismo, maoísmo, cerrar las importaciones, acabar con las empresas más poderosas, que no existan más ricos, nacionalización de todo, como en los tiempos de Velasco. Rehacer el poder judicial, la defensoría del pueblo, el congreso y desaparecer el tribunal constitucional.
Admira a Cuba y Venezuela y quiere que seamos como ellos, países en bancarrota de los que huyen ciudadanos por millones para escapar de la dictadura comunista, la falta de libertad y el hambre. Canadá, Suecia y Noruega son muy diferentes.