Por Jorge Yeshayahu Gonzales-Lara
Según un informe la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza, en los primeros nueve meses del 2022, más de 10,000 peruanos fueron detenidos por los oficiales de inmigración. Es casi el triple de los peruanos que llegaron a esa frontera en 2021, cuando 3,197 inmigrantes de ese país fueron interceptados por agentes federales. Aproximadamente 600 mil peruanos viven en los Estados Unidos en condición de indocumentados o irregular y están en riesgo latente de ser deportados.
La inmigración ilegal de peruanos por la frontera del Sur ha vuelto a romper todos los récords conocidos. Según la Oficina de Aduanas y Protección fronteriza (CBP), Entre octubre del 2021 a agosto del 2022 se registró 11,262 peruanos indocumentados en el cruce de la frontera del Rio Bravo poniendo su vida en riesgo. DHS señala que la migración ilegal o irregular se da cuando una persona ingresa a, o vive en, un país del cual no es ciudadano o ciudadana, violando sus leyes y regulaciones de inmigración.
Cientos de peruanos están solicitando asilo político. En su mayoría jóvenes entre 19 a 35 años y adultos entre 35 a 55 años. Cabe señalar que la mayoría son mujeres estudiantes, trabajadores independientes, pequeños y medianos empresarios, emprendedoras, madres solteras, taxistas y vendedores ambulantes víctimas de extorción por bandas del crimen organizado.
El asilo político en Estados Unidos se puede solicitar una vez dentro del país o en un punto fronterizo al intentar entrar a territorio estadounidense. Cientos de peruanos y peruanas escapan del crimen organizado, en sus modalidades de sicariato, extorción, trata de personas y secuestro, en busca de asilo político buscando proteger sus vidas ante la crisis política y de gobernabilidad del gobierno de Presidente Castillo.
Valeria una joven peruana nos relata que estuvo detenida por más 21 días en un Centro de Detención de Texas, South Texas Family Residential Center, escape de Perú por un temor fundado, víctima de extorción por una banda del crimen organizado, que me exigía el pago de un cupo.” Valeria se graduó como periodista de la Universidad Bausate y Meza y fue víctima de acoso y de extorsión y las amenazas se dirigían a su integridad personal. El asilo afirmativo es un tipo de asilo que se solicita cuando la persona ya está dentro de los Estados Unidos y aún no ha cumplido un año de su estancia en EE.UU. En los casos de asilo afirmativo las personas no se encuentran en un proceso de expulsión y, por tanto, tiene que presentarse frente a un oficial de asilo en USCIS, lo que quiere decir que no tendrá que ir a la Corte.
Manuel de 40, anos se encontraba detenido en El Centro Don Hutto Residencial Center en Texas, y nos relata que escapo del Perú en busca de asilo, víctima de una banda que le exigía el pago de cupos, y cobran un porcentaje de su sueldo. Manuel fue liberado del Centro y se la otorgo la protección humanitario. Con este permiso se pueden disfrutar de algunas libertades:
- Viajar por todo el país sin limitantes, con tan solo portar su pasaporte y el permiso recibido.
- También, recibir ayudas en efectivo o con cupones para alimentos y cobertura del Medicare.
- Solicitar Permiso de Trabajo.
- Mudarse de un estado a otro siempre que tenga documentación que demuestre que no será una carga.
- Solicitar Licencia de Conducir
Evelyn joven emprendedora empresaria del emporio textil de Gamarra, víctima de cobro de cupos y extorción con una banda criminal. La joven emprendedora nos relata que obtuvo un préstamo por una agencia privada, pero desconocía que era la facha de una banda criminal, meses después la banda criminal empezó a extorsionar con el pago de cupos por el préstamo obtenido, al no poder pagar la banda amenazo con secuestrarla, y se inició una seria de llamadas telefónicas con amenaza contra su vida y su familia. Evelyn se le fue programada una audiencia en la Corte de Inmigración donde debe presentar su solicitud de asilo político.
El asilo defensivo es el tipo de asilo que se solicita cuando la persona se encuentra en proceso de remoción en el Tribunal de Inmigración con la Oficina Ejecutiva de Revisión de Casos de Inmigración (EOIR), esto quiere decir que tiene una orden de deportación. Precisamente, se llama “asilo defensivo” porque la persona aplica como un recurso de “defensa” frente a esa orden de deportación. Por lo general, las personas que se someten al proceso de remoción son aquellas detenidas en la frontera de Estados Unidos al intentar ingresar de manera irregular.
El asilo político en Estados Unidos es una especie de refugio que concede este país a un extranjero que escapa de la violencia como resultado de sufrir algún tipo de persecución, discriminación u hostigamiento por su raza, religión, nacionalidad, opiniones políticas o por ser miembro de a un grupo social en particular.
La ley en Estados Unidos contempla la protección de personas que huyen de su nación de origen por miedo a ser perseguidos. Se puede solicitar asilo siempre que demuestre que usted, su familia o personas similares a usted han sufrido persecución o que tienen temor de que se sufrirán persecución por algunas de las causas anteriores.
El crimen organizado ha proliferado especialmente en la costa norte del Perú, una de las principales beneficiadas por el crecimiento económico, del que ha surgido en paralelo. Una de las principales modalidades delictivas de este tipo de crimen es la extorsión. La amenaza se dirige a la integridad personal y se solicita un pago por no atentar contra la integridad de la víctima y, a su vez, brindarle protección frente a una posible organización rival. Extorsión telefónica: ya sea por llamada o mensaje de textos, los delincuentes amenazan a sus víctimas para que efectúen uno o varios depósitos en una cuenta de banco. El móvil es un posible atentado contra su vida o la de sus familiares. En Perú parece haberse desarrollado una evolución criminal que ha transitado del hurto al crimen organizado. La expansión de la extorsión como modalidad delictiva ha tenido mucho que ver en este proceso de aparición, desarrollo y expansión del crimen organizado. Cabe anotar que la extorsión tiene su modalidades que van desde el cobro de cupos y cuotas hasta la extorsión telefónica.
El cambio en el mercado ilegal traería como consecuencia un cambio en la modalidad delictiva. Los siguientes robos tendrían por objeto el cobro de un “rescate” por el auto robado. De pronto, se dio paso al secuestro de vehículos. La generalización de esta estrategia dio un paso más en la evolución del mercado ilegal. Poco a poco, estas bandas delictivas empezaron a brindar protección a cambio de un pago mensual: “un cupo”. El pago garantizaba que los miembros de la banda o de otras no robaran los coches y, en caso de que ocurriera, la organización que brindaba protección lo recuperaría como parte de su servicio. Sin darse cuenta, la repetición de esta práctica haría surgir una nueva modalidad que luego se extendería por toda la ciudad, dándose un tránsito del hurto a la extorsión.
Cobro de cupos: empleado principalmente en las obras de construcción civil, donde los sindicatos de fachada reclaman cupos para trabajadores ligados a su organización y cobran un porcentaje de su sueldo. Cobro de cuotas: las organizaciones cobran a empresarios de construcción civil, comerciantes, transportistas, entre otros, por dejarlos desarrollar actividades en la zona que tienen bajo su control. Además, pueden solicitarles cobros semanales por seguridad. Los objetivos son los dueños de las principales empresas y comercios de la zona, sobre todo pequeños y medianos empresarios (bodegas, talleres mecánicos) así como transportistas, comerciantes de calzado y prendas de vestir o cualquier otra actividad que se desarrolle en la zona”.
Cientos de peruanos y peruanas son víctimas de persecución por el crimen organizado el Perú, o de temor fundado por lo que sufrían persecución por las razones de ser grupo social en particular. La extorción es una de las modalidades que van desde cobro de cupos y cuotas hasta la extorsión vía celular.
La prevención de la escalada y caótica de los flujos migratorios sólo puede tener éxito a través de acciones y compromisos multilaterales, haciendo un llamado a las autoridades peruanas a una ronda de reuniones con el Departamento de Estado y funcionarios del Departamento de Seguridad Nacional de los Estados Unidos (Departament of Homeland Security).
Miami, septiembre 16, 2022