Ahora que el ex presidente de la república Alejandro Toledo está preso en el penal de Barbadillo y que sus colaboradores más cercanos se esconden o prefieren ser ignorados, les cuento que trabajé para el último año de su gobierno.
Asumí la presidencia del Instituto de Radio y Televisión del Perú IRTP, cuando el nivel de aprobación a su gestión en el cuarto año, era de apenas 8.3 %, la más baja jamás registrada si se compara con los gobiernos de Belaunde, Fujimori y los dos gobiernos de Alan García.
Junto a esta nota reproduzco un cuadro comparativo publicado en el diario Correo, del 14 de agosto del 2008, según mediciones realizadas por CPI y comentarios del analista Manuel Saavedra que recoge la periodista Karla De Rojas Guedes.
La nota narra lo ocurrido con la popularidad del ex presidente García al comenzar el tercer año de su segundo gobierno de 26%, debajo del porcentaje alcanzado por el ex presidente Belaunde en el mismo periodo de su segundo mandato.
Cuando Alejandro Toledo dejó el gobierno, luego de cumplir su quinto año, según el mismo cuadro, se ubica por encima del porcentaje de aceptación alcanzado por Belaunde y García, superado solamente por Alberto Fujimori, curiosamente su compañero de prisión.
El ex presidente Belaunde acabó con 23% de aprobación, Alan García con 22%, Toledo con 34.7% y Fujimori con 43.4%.
Hoy, luego de conocerse los casos de corrupción que motivaron su extradición, supongo la aceptación a Toledo habrá caído nuevamente por los suelos, pese a las cosas buenas que puedan haber ocurrido durante su gobierno.
La corrupción borra cualquier buena gestión que tuvieron todos los gobiernos y motiva solamente demandas de justicia.