La carabina de Ambrosio apareció hace mucho tiempo en los dichos y comentarios de la literatura española.
Luis Montoto fue un escritor sevillano autor de numerosos ensayos, poesías, obras de teatro y narrativa variada a quien le atribuyen ser el creador de este personaje mítico llamado Ambrosio.
Se trata de un personaje de ficción, tal vez inspirado en uno real, un maleante, un atracador andaluz muy singular debido a que portaba una carabina que en lugar de balas o perdigones tenía semillas, con las que no podría matar ni una mosca.
De allí que la carabina de Ambrosio sea sinónimo de algo inútil, un arma que solo podría servir para amedrentar, no dispara ni un balín, es solo pantalla, un juguete, un cachivache, un aparato ineficaz.
- Le encargaron al ministro que acabe con las mafias del crimen organizado, que tienen en jaque al país.
- Pero ese ministro está igual que la carabina de Ambrosio.
Cuando dicen a alguien que está igual que la carabina de Ambrosio, quiere decir que no da para atrás ni para adelante, no camina, no funciona, no sirve.
La carabina de Ambrosio, entonces, se convierte en símbolo de incompetencia, incapacidad, impericia, torpeza, inutilidad.