Para entrar en política hay que tener correa, comentó una presentadora de televisión queriendo explicar que las personas deben ser tolerantes, permisivas con las críticas de los adversarios.
Cuando una persona se molesta debido a que le jugaron una broma pesada sus mismos amigos le dicen, lo que pasa es que tú no tienes correa.
Tener correa es ser flexible, tener aguante y ser transigente con las bromas de los demás, otras veces con sus críticas.
El origen del dicho tiene que ver con los religiosos de San Agustín, que, a diferencia de otras órdenes religiosas, en lugar de una soga usan correa y la expresión inicialmente era” tener más correa que San Agustín”.
San Agustín se caracterizó por su gran paciencia y resignación.