Ayer hubo elecciones en Chile y un candidato de extrema derecha fue el que obtuvo más votos, pero tendrá que volver a enfrentar a uno de izquierda en una segunda ronda electoral para la presidencia de ese país. Los candidatos José Antonio Kast, del Partido Republicano de Chile, y Gabriel Boric, del Pacto Apruebo Dignidad, lideran los resultados.
El derechista Kast, ha sido diputado, tiene 55 años de edad y es abogado de profesión, defensor de la dictadura de Augusto Pinochet, fracasó el 2017 cuando intentó por primera vez llegar al poder y aunque en esta ocasión comenzó rezagado finalmente consiguió arrebatar los votos al candidato oficialista, de derecha moderada Sebastián Sichel.
Gabriel Boric, el de izquierda, solo consiguió ganar en el extremo sur del país, en la capital Santiago y Valparaiso.
Una posición diferente es la de Franco Parisi, liberal residente en Estados Unidos que encarna a quienes dicen no estar con la izquierda ni con la derecha.
A fuerza de revueltas, disturbios y permanente enfrentamiento con los carabineros, los izquierdistas consiguieron instalar una asamblea constituyente de la que se arrepienten, si queremos interpretar así la votación de ayer.
Lo que sucede en Chile y en muchas partes, es que los comunistas recurren a la violencia para imponer sus ideas y muchas veces lo consiguen.
La constitución que está redactando esa asamblea al final tendrá que ser sometida a un plebiscito para su aprobación o rechazo y la votación de ayer puede haber sido un anticipo de lo que ocurrirá el próximo año.
La segunda ronda para elegir al sucesor del presidente Piñera está convocada para el próximo 19 de diciembre.