Más de un millón y medio de jóvenes era la población universitaria en el Perú antes de la epidemia de Covd-19 y muchos han visto afectado el fututo de sus estudios interrumpidos por diversas razones, como el fallecimiento o desempleo de sus padres y la necesidad de asegurar un pan a sus hogares.
Al declararse la pandemia hubo anuncios de funcionarios del Estado garantizando el traslado de matrícula del sector privado al público, para atender la crisis económica que desencadenó una sorpresiva ola de deserción.
Las limitaciones económicas de la universidad pública las ha empujado a realizar ajustes para responder a la reducción de los ingresos, que por concepto de recursos propios ayudaban a la marcha de esos centros de estudio.
Hasta antes de la pandemia el porcentaje de estudiantes que interrumpía sus estudios antes de concluirlos, en la costa y en la selva era de alrededor del 24% mientras que en la sierra de 18%.
Una vez desatada la epidemia, en el 2020, estos porcentajes se incrementaron significativamente y el traslado tiene que ver con el nivel de selectividad. Mientras la posibilidad de ser admitido en una universidad privada es de alrededor el 76 %, en el caso de las universidades públicas es de menos del 20%.
El proceso de crecimiento de la comunidad universitaria se frenó a partir de la puesta en marcha del programa de licenciamiento, a cargo de la Superintendencia de Universidades SUNEDU.
Más de 300 locales de alrededor de 50 universidades comenzaron un periodo de cierre o clausura, tanto de universidades públicas como privadas, por no satisfacer las exigencias de condiciones básicas de calidad para la provisión del servicio educativo.
Solo en el año 2020 un total de 174 mil estudiantes universitarios dejaron las aulas y abandonaron sus carreras como consecuencia de la epidemia, según cifras oficiales del Ministerio de Educación.
El factor económico es la principal causa para la deserción universitaria y en el caso de las universidades privadas no se concretaron descuentos significativos en las pensiones, pese a que se dejó a un lado la modalidad presencial para abocarse de lleno a la educación a distancia.
En el presente año son 200 mil estudiantes los que abandonaron sus universidades, debido principalmente a la epidemia de Covid 19 y a diferencia de lo que ocurre en los niveles de educación secundaria y primaria, en las universidades no resulta fácil el traslado del sector privado al sector público.
Distintas exigencias que implican exámenes de suficiencia para convalidar conocimientos hacen poco viable estos traslados y los jóvenes finalmente optan por abandonar los estudios definitivamente. Por eso urge atención del gobierno para atender de mejor manera el impacto de la epidemia del Covid 19 en la comunidad universitaria.