Es acceder a un lugar copado por los contrarios que pueden ser adversarios, delincuentes o miembros de una facción ideológica distinta.
Caer en la boca del lobo significa llegar involuntariamente a un lugar del que difícilmente saldrás bien librado, sin que sufras algún daño, alguna agresión física o verbal.
Llegaste a una situación de la que, seguramente, saldrás con mucha dificultad, habrás perdido algo en el camino.
Generalmente se cae en la boca del lobo de manera involuntaria, inconsciente, irresponsable.
Cuentan que el origen del dicho tiene que ver con un cuento en el que una cigüeña mete su cabeza en la boca de un lobo, para ayudarlo a zafarse de un hueso que tenía atorado en la garganta.
La boca del lobo es una película de Francisco Lombardi, del año 1988.