El dicho original “Ni quito ni pongo rey, pero ayudo a mi señor” es atribuido al francés Bertrand du Guesclin, un célebre militar que ayudó a Enrique de Trastámara a matar y así quitar el trono de Castilla a su hermano por parte de padre Pedro I.
Es un dicho muy cínico y se usa para justificar la intervención a favor de alguno de los dos bandos en litigio, por algún tipo de lealtad comprometida previamente.
Muerto Pedro I, Enrique II se quedó sin rival como rey de Castilla. Y comenzó la dinastía Trastámara y de esa rama viene Isabel I de Castilla,Isabel la Católica.
Bertrand du Guesclin fue un mercenario que jugó importante papel en la Guerra de los cien Años, contra Inglaterra.