La Federación de Periodistas y Comunicadores del Sur que preside Juan Carlos Sarmiento, realizó ayer un sencillo pero merecido homenaje a una dama tacneña, verdaderamente tacneña como muy pocas, por el ejemplo que siempre fue y seguirá siendo para las nuevas generaciones.
Se trata de la señora profesora Celia Gómez Morales, a quien nos hubiera gustado rendir homenaje en vida, pero igual, con el mismo valor lo hicieron ante sus hijos, ante su familia, ante sus amigos, ante un pueblo al que sirvió con alma, vida y corazón, de manera desinteresada.
Ningún escenario pudo ser mejor para un acto de esta naturaleza que la Casa del Historiador Jorge Basadre, que seguramente habría ofrecido en vida su hogar para hacer justicia a esta distinguida dama.
Celia Gómez Morales fue una poetisa que se inmortalizó en el poema que existe grabado en piedra en el monumento a la mujer tacneña en la ciudad de Lima, en San Isidro.
Ella escribió páginas inmortales que tendrían que conservarse en libros que aseguren su acceso a niñas y niños del futuro. Fue una promotora cultural que buscó preservar las costumbres y la historia de Tacna, sin buscar jamás un beneficio personal.
Fue una activista y defensora de los intereses de esta ciudad desde los diversos escenarios que ocupó en su vida diaria, como hija y como madre, como alumna y como maestra, como empresaria y ciudadana que defiende el interés común y lucha por el desarrollo de su ciudad.
Fue una mujer emprendedora y por eso inauguró la primera boutique en la calle más central de Tacna donde promovió los primeros desfiles de moda, que organizó siempre con fines benéficos, incluso con modelos internacionales.
En algún momento presidió la Cámara de Comercio y desde allí se interesó por la gente emprendedora y los pequeños empresarios que de manera honesta y formal contribuyen con el progreso de la patria.
Celia Gómez Morales fue criada, como las buenas familias tacneñas, con especial atención a lo que son los valores nacionales, los que mueven a los patriotas. Por eso fue que se convirtió también en una recitadora que aprovechaba toda ocasión para declamar su amor al Perú y a nuestra bandera.
Participó muchas veces en el desfile de la Bandera Nacional cada 28 de agosto, hasta que las fuerzas la acompañaron. Luego desde el balcón de la casa que construyó con mucho esfuerzo en la calle San Martín. Desde ahí le recitaba a la Bandera y arrojaba flores en señal de homenaje y respeto.
Sacó adelante a su familia y a sus hijos Manuel Jesús, Carlos Enrique fallecido en 2013 y María Celia a quienes inculcó los mismos valores que recibió de sus padres y abuelos.
Son numerosas las familias tacneñas que pueden dar testimonio de la entrega solidaria de Celia Gómez, hacia los más necesitados, por quienes tantas veces dejó sus obligaciones laborales y familiares para brindarles el apoyo que requerían en alguna emergencia, en algo urgente que requería el concurso de ella para hacer respetar sus derechos ciudadanos.
Fue sinónimo de entrega y abnegación y se marchó en silencio, sabiendo que se acercaba su fin, pero confiada en la grandeza de un Dios que la recibió como acoge a las almas buenas que llegan al cielo.
Por eso es que la Federación de Periodistas y Comunicadores del Sur, junto con la Federación de Mujeres Líderes Originarias del Perú, la Asociación de Derechos Humanos del Sur y el Colectivo de Luchadores Sociales de Tacna, le rindieron un homenaje a poco tiempo de su partida y en el mes que rendimos también homenaje al aniversario de la reincorporación de Tacna al territorio nacional.
Recibe Celia Gómez Morales el testimonio de tus hijos, tu familia, tus paisanos, de un pueblo que estará siempre agradecido a la bondad infinita de una mujer tacneña, orgullo de los buenos peruanos.