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sábado, noviembre 23, 2024

VELASCO Y SANTANA

 

En agosto de 1971 se anunció la presentación de Carlos Santana en Lima, en el estadio de la Universidad de San Marcos. Con su característica cabellera africanlook recorría el continente cantando que una mujer negra mágica le convirtió el corazón en piedra, pero que la necesitaba tanto que no podía dejarla.

Abraxas es el título con el que rinde homenaje al percusionista Tito Puente, recopilación de composiciones que fusionan rock con música afro latina caribeño americana, decía maestra vida Saravá.

Dirigentes universitarios de izquierda radical, fortalecidos por el éxito de la lucha para eliminar dos años de estudios generales, quemaron un auto e inundaron la cancha de fútbol del estadio de la universidad para impedir el espectáculo, acusado de ser expresión de la música del imperialismo yanki.

Los militares tampoco simpatizaban con el grupo de Santana y los expulsó del país, junto con los promotores Jorge y Peter Koechlin, pese a contar con las autorizaciones de la municipalidad de Lima, el instituto Nacional de Cultura y del Ministerio de Educación.

Entonces el mundo se enteró que en el Perú gobernaba una dictadura militar intolerante, capaz de expulsar a músicos que habían llegado a ofrecer lo único que eran capaces de dar, un poco de música moderna y no política que pudiese amenazarlos, como aparente y erróneamente habían interpretado la visita.

Santana era el símbolo de un movimiento cultural pacifista y sigue siendo reconocido como uno de los mejores guitarristas de música popular del mundo, al tiempo de ser la encarnación de una fusión que resume el misterio del ritmo y espíritu latino, con la fuerza épica del sentimiento anglosajón.

Más que un músico extraordinario es la personificación de una mentalidad diferente. Desafía lo convencional rompiendo con toda una época, al tiempo que inspiró la posibilidad de un mundo diferente, en el que reine la paz y la armonía entre todos los hombres.

Santana fue expulsado debido a que representaba al movimiento contracultural libertario y pacifista mundial, a los hippies que se declaraban admiradores de Mahatma Gandhi por su rechazo a la lucha armada y su prédica de no violencia.

 

 

 

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