Luis Humberto Béjar es un cura argentino que salió del Perú después que el obispo de Puno, Jorge Pedro Carrión Pavlich, le pidió se tome un “año sabático”. Le echaba la culpa al gobierno por los muertos de Puno.
Luis Balazar García es otro cura que culpa a Dina Boluarte, a las Fuerzas Armadas y Policía Nacional por la muerte de alrededor de 60 personas durante las protestas que hubo luego del fracasado golpe de Estado de Pedro Castillo.
Así como los curas azuzadores existe un gran sector de la población a la que hay que explicar y demostrar, con imágenes, cifras y datos objetivos, lo que sucedió en esos días y frenar la “narrativa” de “Dina asesina”.
No sé qué esperan en el gobierno para producir un documental que muestre la barbarie del terrorismo que atacó en esos días, quemó a un policía dentro de su carro patrullero y apedreó a un grupo de soldados algunos de los cuales murieron ahogados en las heladas aguas del río Ilave, en Puno. Ellos murieron por no usar sus armas.
Numerosas muertes fueron consecuencia si, de disparos de soldados o policías. Así defendieron sus vidas de turbas empujadas por azuzadores de Sendero Luminoso que atacaron cuando se les fue de las manos el gobierno de Pedro Castillo.
Deben mostrar la quema y saqueo de numerosos locales públicos y privados, el incendio de comisarías, el ataque con armas de fuego, dinamita, guaracas, bombas molotov y pirotécnicos contra policías, empresas, aeropuertos y bloqueo de carreteras.
Ese mismo documental, en todos los idiomas, podría circular por las embajadas del Perú, en las redes sociales y canales de televisión, de todo el mundo.
Es como la gente podrá entender lo sucedido y dejar de ver a Dina como candidata a la cárcel, como se le ve ahora. ¿Qué están esperando?
