Decirle a alguien zamba canuta, es algo así como una catarata de insultos, cantarle todas sus verdades, hacerle el aclare que nunca le habían hecho, exhibir todos sus trapitos sucios, sus antecedentes y malas prácticas, criticarlo abiertamente para que escuchen todos.
La congresista Chirinos le dijo zamba canuta a Bellido, cuando este se presentó para pedir el voto de confianza y le recordó lo insolente que fue en los primeros días de trajinar por el congreso.
Pero ¿de dónde viene eso de zamba canuta?, ¿por qué zamba? y ¿qué significa canuta?
El dicho tiene su origen en Chile, aparentemente, donde llaman canuto a los ministros o pastores protestantes y a cualquier individuo que se identifique con el protestantismo. Esta palabra viene de Canut, Juan Bautista Canut de Bon, un pastor evangélico y ex-sacerdote jesuita, quien vivió en Chile en 1871.
Y la denominación «zamba» se refiere a las mestizas descendientes de una persona indígena americana y otra negra.
La zamba canuta, cuenta la historia, fue una mujer que salía a las calles y gritaba a voz en cuello todos sus pecados, con el ánimo de conseguir el perdón público con su confesión.
Decirle a alguien zamba canuta es algo como decir la vela verde, pero esa es otra historia, más complicada.