“El apóstol de la sonrisa” es la distinción que acaba de otorgar el Club de Leones al médico trujillano Walter Zegarra, en reconocimiento y gratitud como gestor e impulsor del programa “Prolapar” dedicado a niños con labios fisurados.
La LXXIV Convención del Distrito Múltiple H del Club de Leones acordó la distinción dedicada a reconocer los valores morales, culturales y científicos de personas que han logrado destacarse dentro y fuera del leonismo.
Walter Zegarra y su equipo de colaboradores ha conseguido operar a más de 10 mil 500 niños con el Programa de Labio y Paladar Fisurado PROLAPAR, con apoyo del Club de Leones desde 1983.
La iniciativa fue respaldada por el Club de Leones de Las Quintanas, en Trujillo, con campañas de operaciones gratuitas en los hospitales Belén y Regional. Luego se extendió con respaldo de los Clubs de Leones de Chota en Cajamarca, Piura y Chimbote en Ancash.
En 1987 logró todo un record al operar a 37 niños en la ciudad de Sullana. Un año después continuó la cruzada en su propia clínica y la convirtió en el mayor centro para este tipo de cirugías en el país, mientras los hospitales Belén y Regional de Trujillo son ahora hospitales de referencia para todo el norte.
Con apoyo de otros profesionales de la medicina entre los que están varios miembros de su familia, continuó con campañas de operaciones en Tumbes, Piura, Talara, Lambayeque, Chiclayo, Chepén, Cajamarca, Chimbote, Chota y Jaén.
Hasta 1992 Zegarra había realizado más de 3 mil 900 cirugías y comenzó a recibir familias que de todas partes. En 1994 la municipalidad de Trujillo destina un terreno de 2 mil 50 metros cuadrados, en la urbanización San Vicente, para que el Club de Leones Las Quintanas construya una clínica y los scouts su local institucional.
Un año después, en la segunda convención de gobernadores del Club de Leones en Iquitos, deciden considerar a PROLAPAR como un proyecto del Distrito H-1.
El presidente internacional del Club de Leones, Agustín Soliva, reconoce a Zegarra en 1996, por la construcción de “puentes” asociados a los objetivos humanitarios del Lions Club International, recibe una invitación del Lions Club SunnySide de Nueva York para exponer los alcances de su cruzada y una donación de mil 500 dólares, con lo que comienza la construcción de la Clínica PROLAPAR, en el terreno destinado por la municipalidad.
Fue elegido Gobernador del distrito H-1 para el periodo 1997-98 y promovió el concurso de pintura “Cartel por la paz” que a nivel mundial ganó la joven tumbesina Cinthya Villacorta Ulfe.
En 1998 el presidente internacional de los Leones, Judge Howard L Patterson Jr. lo distingue con un Certificado de Apreciación por su dedicación humanitaria y servicio .
En 1999 recibe otro reconocimiento por parte del presidente internacional del Club de Leones, Kajit Habanana, en armonía con los principios humanitarios del Club de Leones.
Después del año 2000 emprende campañas de operación de paladar fisurado en las ciudades de Cusco, Iquitos, Tarapoto, Ica y en el Hospital Collique de Lima.
En el 2010 Walter Zegarra recibe de la Universidad Nacional de Trujillo la Distinción de Primer Grado “Libertador Simón Bolívar”, reconocimiento a los ex alumnos más destacados.
Walter Zegarra es el único peruano distinguido con la medalla “Premio humanitario a nivel internacional” del Club de Leones. Ocurrió en el 2014 luego de la visita del presidente internacional Bary J. Palmer
“En Perú tuve una visita muy emotiva a una clínica que trata a niños con desfiguración facial – narra Palmer- la clínica está dirigida por un grupo de cirujanos plásticos Leones y es apoyada por el Club de Leones de Perú. Hay más de 9,000 operaciones realizadas a niños del Perú, todo sin costo alguno. Además de reunirme con los bebés que se operaban ese día, también me reuní con los niños y los adultos jóvenes cuya vida los Leones habían cambiado. Hugo de 19 años fue operado cuando tenía un mes de edad, él es director de una orquesta sinfónica juvenil. Una niña operada cuando apenas era un bebé, tiene un CI más altos que los médicos hayan visto nunca. Estos jóvenes están llevando una vida saludable en la que pueden seguir sus sueños y agradezco a los Leones del Perú por ayudarlos a hacer posible esos sueños”.
El título que acaba de recibir, como “Apóstol de la sonrisa” se suma a los numerosos reconocimientos, en el Perú y el extranjero, que alientan su apoyo a los niños.