Promete el oro y el moro es un dicho que se usa con frecuencia en España y los países hispanohablantes cuando alguien hace ofrecimientos que de antemano se sabe no podrá cumplir, pero hace estas promesas porque quiere conseguir algo a toda costa, a como dé lugar, cueste lo que cueste.
Pero ¿de dónde sale la frase?,¿ cuál es el origen? Lo del moro revela que indiscutiblemente tiene que ver con el reino de España y el complejo proceso político y militar de conquista musulmana de esos territorios ocurrida en el siglo VIII.
Los árabes no se retiraron del sur de España sino hasta después de ocho siglos, la ocupación duró entre los años 711 y 1492 de la era cristiana y por eso la mezcla de tradiciones culturales que trajeron los conquistadores cuando llegaron a Sudamérica.
Cuenta la historia que, en Jerez, que es una ciudad ubicada en la provincia de Cádiz, al sur de Andalucía, un grupo de caballeros españoles capturó a importantes dignatarios árabes con el fin de pedir un rescate por su liberación.
Abdalá, alcalde de Ronda, una ciudad de la provincia de Málaga, pagó una fuerte suma por su liberación, pero no consiguió que liberen a su sobrino Hamet, que seguía en condición de rehén alegando que debían pagar otra fuerte suma, debido a que a los secuestradores les costaba mucho dinero su manutención.
Esto sucedía en el año 1420, siendo rey de España Juan II, quien ordenó que todos los árabes fueran liberados a excepción de Hamet, quien debía ser conducido a las cortes, donde se definiría su situación.
Entre lo alegado por los caballeros y el rey, afirman se habló del oro del rescate y corrió el rumor, por toda Andalucía, que el soberano quería quedarse con el oro y el moro.
El oro y el moro vinieron hasta el Perú y ahora está en boca de candidatos que los ofrecen por todas partes para conquistar votos en el proceso electoral que tendrá su epicentro dentro de tres semanas, el once de abril.