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sábado, noviembre 23, 2024

VALENTIN PANIAGUA

A pocos meses de terminar el segundo periodo de gobierno del arquitecto Fernando Belaunde Terry, fui contratado por Vlado Radovic para redactar guiones de una serie de documentales sobre la obra del ex presidente.

Inti Films era la empresa y su principal centro de operaciones estaba en una casa de la calle López de Ayala, en San Borja, donde un día conocí a don Valentín Paniagua Corazao, que acudió a nuestro llamado para conversar e ilustrar sobre el pensamiento político del fundador de Acción Popular.

Era importante ahondar en la conquista del Perú por los peruanos y supe que “a la agitación imperialista de las grandes potencias en busca de dominio universal, la nación debe oponer una empresa creadora, un sí, un más en esfuerzo en que crezca y adquiera conciencia de sí misma. Las protestas han de ser menores y las adquisiciones más seguras, al elevarse a la altura de los tiempos en una gesta de hombres libres, unidos en el sudor y el esfuerzo”.

Paniagua era silencioso, entraba como queriendo pasar desapercibido, caminaba lento, sin hacer ningún ruido, me parecía con miedo de incomodar a los editores que luchaban con viejos y ruidosos equipos. Salíamos a otro ambiente y con una taza de café lo escuchaba recitar con ese cantar cusqueño que revela ancestrales costumbres en el manejo del idioma.

Nunca sospeché (él tampoco) que se convertiría en presidente de la república, como consecuencia de procedimientos constitucionales que resolvieron el entrampamiento político de un momento que marcó un hito en la historia del país.

No es posible, ni nadie se atreve, hacer un paralelo con Sagasti, debido a que Paniagua era un estudioso de las leyes, dedicado al mundo académico y tuve el privilegio de disfrutarlo en clases muy particulares. Estuvo ocho meses en palacio y concedió 154 indultos, 71 conmutaciones y 2 derechos de gracia a presos acusados de terrorismo. ¿Y con Sagasti?

Estuve hace un tiempo en lo que fue su domicilio de Jesús María, conversando con amigos que recuerdan el importante rol que le tocó desempeñar al comenzar este siglo y siguen lamentando su partida. Un pequeño gran hombre que dejó huella en un momento difícil.

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